Vivir muchos años y con buena calidad de vida es el deseo de todas las personas. Pero el deterioro que ocurre con la edad y el hecho de envejecer no debe ser traumático, es por eso que tomar medidas preventivas suponen una vejez llena de vida y salud.
Lo más lamentable es que esta etapa puede sonar aterradora para muchos porque la relacionan con los famosos achaques, caprichos, mal genio, dolores articulares, y unas cuantas cosas más que terminan por incapacitar, no tanto en su parte física, sino mental.
Mientras tanto, los que tienen la posibilidad de llegar a esta etapa se quejan por otras cosas. Doña María, por ejemplo, una mujer de 69 años, dice que sus hijos la cuidan como si fuera un bebé, no la dejan salir sola a la calle y menos realizar tareas en su hogar. “Yo creo que es por el amor que me tienen, pero necesito estar activa y ellos no lo entienden”.
Lo mejor para llegar a esta etapa con lucidez y llenos de vida, como María, es la prevención, esto no es cosa de viejos porque es en la temprana infancia donde se cargan las baterías para resistir los embates que trae consigo la vejez. A esto se le denomina gerontología preventiva.
Según el médico geriatra José Fernando Gómez, el propósito fundamental es retardar los procesos y enfermedades relacionados con el tiempo, de ahí que se inicie con gente sana. Implica el análisis de su grupo familiar y su estilo de vida para concluir qué enfermedades podrá padecer.
Por otra parte, cuando ya se llega a los 65 años se recomienda hacer geriatría preventiva, “es saber qué hacer cuando se tiene la enfermedad para evitar que esta lo lleve a la discapacidad o la minusvalía”.
Otro aspecto importante que destaca Gómez es el apoyo que debe recibir el adulto mayor, tanto de su familia como de la sociedad. “Ser parte de una red social, desde un costurero hasta un grupo de oración o voluntariado es un determinante significativo de longevidad, en especial los hombres”.
Advierte que aquellos que viven en el aislamiento y con la falta de contacto con otros tienen mayor riesgo de permanecer más mal cuando envejecen.
“Las relaciones interpersonales incluyen contactos, intercambio de información y adecuado soporte emocional, o sea querer a la gente”.
Por eso recuerde que aunque las canas, las arrugas, las manchas y los años pueden ser signos de la edad, de usted depende que se conviertan en impedimento para encarar esta etapa. ¿Cómo lo hace?: con buena alimentación, actividad física y mucho contacto con otras personas.
Estas son algunas recomendaciones que hace el geriatra José Fernando Gómez para envejecer saludablemente.
* Realizar actividad física constante, esto incluye no solamente hacer ejercicio al menos 45 minutos tres veces por semana, sino que se puede cambiar por bailar o caminar.
* Evitar la obesidad, en geriatría hay un dicho que dice “al envejecer a los gordos solo los quiere la mamá”, para significar que la obesidad es un verdadero problema en los ancianos, en especial por el mayor riesgo de problemas de hipertensión y diabetes, además, el aumento de artrosis de rodillas por soportar tanto peso.
* Suspender el tabaquismo. El humo del cigarrillo junto a los rayos solares son las dos causas principales de envejecimiento de piel. Además se ha demostrado que la gente que fuma tiene discapacidad y problemas mucho tiempo antes de morir que los que no fuman.
Busque satisfacer su vida:
* Tenga lazos afectivos y sociales.
* Visite familiares, busque apoyo.
* Mantenga un espíritu abierto al aprendizaje constante.
* No pierda la capacidad de sorprenderse y ser curioso.
* Busque ser útil.
Alimentación:
* Aumentar el consumo de antioxidantes entre vegetales y frutas.
* Consumir más cantidad de agua.
* No se deje engordar.
Envejecimiento activo:
Para hablar de envejecimiento exitoso es necesario tener las tres características, puesto que solamente contar con alguna de ellas puede ser definido como un envejecimiento usual que es el que se presenta sin enfermedades, pero con alto riesgo de enfermar.
* Una baja probabilidad de enfermedad y de incapacitarse.
* Un alto nivel de capacidad física y mental.
* Un elevado nivel de satisfacción con la vida.
Ejercite su mente:
Frente a la pérdida de la memoria, explica el geriatra José Fernando Gómez, la mitad ocurre por causas biológicas como la disminución de acetilcolina (sustancia que permite mantener memoria inmediata o memoria de trabajo), mientras que la otra mitad es por desuso, falta de atención, depresión o higiene del sueño.
Ejercicios:
* Para quien no tiene atención, coloque un vaso plástico en la parte superior de la mano, sosténgalo en el aire mientras lo observa por algunos segundos.
* Lea un artículo y seleccione 10 palabras que más le llamaron la atención, cuando finalice debe saber al menos siete, si no lo logra vuelva a comenzar con otro artículo, así activa la memoria de la asociación.
* Cuando vea televisión recuerde los comerciales que pasaron, en qué orden y si los puede describir mucho mejor. También lo puede hacer con las telenovelas.
* Haga crucigramas, sopas de letras y juegue ajedrez.
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